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viernes, 24 de enero de 2020

MONEY AND MEDIA

Da igual el tiempo que tenga este artículo. Sigue vigente.

Desde el documental del polifacético Michael Moore, “Bowling for Columbine”, no se había hecho una crítica tan feroz como realista de algunos aspectos de la vida norteamericana.



 Entonces se hablaba del despropósito que supone estar armado hasta los dientes por si acaso. Esto es, defensa a ultranza preventiva. Muchos fueron los que sonrojaron, y asociaciones legendarias como la del rifle salieron en los medios para quejarse.  El caso que nos ocupa es similar en varios aspectos:

1.    Se critica una parte de la sociedad americana que vive bajo el paraguas omnimodo de una institución:  la Iglesia. (En el caso de Moore, el Estado)
2.   La Fama del evento distribuido en los medios sobrepasa las fronteras de los USA. (Padre de Familia y Bowling for Columbine se han visto en medio mundo con reconocimientos en el otro medio).
3.   El origen de las críticas proviene de grupos de dudosa moralidad objetiva. Ni los chicos de los rifles con Heston a la cabeza, ni estas familias “pseudocatólicas” pueden presumir de tener un actitud impía y defensora de los derechos humanos pero...

Son grupos extremadamente poderosos. Hasta tal punto los son que han condicionado el sistema educativo americano. Personalmente soy profesor de secundaria y algunos años impartí biología en el último curso de la enseñanza obligatoria. Ahí se estudia la evolución de las especies. Darwin es universalmente estudiado menos en los USA. Allí triunfa el Creacionismo. Una teoría que cree que todo lo creó un dios y que las mutaciones y cambios de las especies no están en sus planes. Cuando aparecen fósiles que solucionan problemas de datación de especies se quedan callados. Cuando desaparece una especie es porque su dios así lo ha decidido. Es tal el colmo de los despropósitos que parece mentira que grupos de presión cristianos hayan conseguido esta barbaridad. Lo peor no es eso. Lo peor es conseguir que su sociedad lo crea y defienda.



¿Se puede luchar contra estos grupos de presión? Y si así fuera, ¿quién podría vencerles?
Sí se puede pero el único elemento que puede vencerles se llama Dólar. Hemos estudiado que los conflictos entre las organizaciones mediáticas y su creativos surgen cuando las tendencias políticas interfieren con las libertades de expresión de los individuos. En este caso interfieren de forma brutal. Murdoch es un emperador mediático republicano y  MacFarlane, creador de la serie, un partidario del candidato demócrata Barack Obama.

¡A la calle señor Macfarlane! Le dice la mitad de Murdoch a su otra mitad. ¡Espere un momento, siéntese señor Macfarlane! Le responde la mitad que sabe de los problemas en el Reino Unido y de la crisis global que rodea a los medios. Ambas mitades se sientan a pensar la repercusión mediática de la serie, las amenazas de los grupos de presión, las felicitaciones de la audiencia y, de repente, Macfarlane pone sobre la mesa todas las facturas que la Fox debe pagar cada día. Vivir de la publicidad no es su único estilo de vida. Las televisiones de pago viven de su calidad y esto las hace más libres.

¿Y si mi calidad de contenidos riñe con mis principios ideológicos? 
Entra en acción el señor Dólar. Los medios son empresas y como tales procuran la obtención de beneficios. Los principios son para después del trabajo (deben pensar).


Las audiencias están empezando a ser conocedoras de la fuerza que tienen. También están recibiendo señales de que se les escucha y atiende. Se organizan rápido y las nuevas tecnologías juegan a su favor. En recientes fechas lo vivimos en España con agrado. “La Noria” de Tele5 llegó a ofrecer publicidad gratuita porque veía que el barco se hundía. La Fox no puede hacer caso a injurias dirigidas, por mucho que sean de la línea de pensamiento de su patrón, porque los que pagan a su patrón son otros y muchos, y se llaman Audiencia, y de apellido Dólar.

Esto respalda la continuidad de la serie que se atreve a sacar contenidos relacionando a McCain con los nazi. ¿Acaso no es mayor el número de republicanos que los de las familias cristianas? ¿No supone un reto a parte de la Audiencia?



La clave se encuentra en el Humor Satírico “por igual”. Estas son las explicaciones de un representante de la serie. “El show ofende en igualdad de oportunidades”. Cierto es que tensar la cuerda supone aceptar que se puede romper pero los creativos son más listos que todos esos grupos de presión. Una de cal y cinco de arena puede ser un “por igual” que supere la ira del jefe y la audiencia. Mientras la fórmula funcione y la caja (no de Pandora sino registradora) no deje de sonar, ya pueden quejarse todos esos grupos porque su grito será como pregonar en el desierto.

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